En México el 72 por ciento de los adultos y el 70 por ciento de los niños padecen obesidad o sobrepeso

En México el 72 por ciento de los adultos y el 70 por ciento de los niños padecen obesidad o sobrepeso

 

  • La obesidad y sobrepeso son problemas graves de salud pública
  • Esta condición puede ser transmitida a los hijos, nietos y biznietos

 

 

En México, la obesidad y el sobrepeso constituyen un grave problema de salud pública y no se cuenta con estrategias efectivas para su atención y prevención. El 72 por ciento de los adultos padece sobrepeso o algún grado de obesidad, así como el 70 por ciento de los niños.

 

México es el segundo país con altos índices de obesidad y sobrepeso, advirtieron los expertos universitarios mexicanos Verónica Haydée Lugo Martínez, José René Escalona Múgica, Carlos Alfonso Larqué Velázquez y Guadalupe Sánchez Bringas, investigadores del Departamento de Embriología de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

 

Según la Organización Mundial de la Salud, en 2018 en México el gasto relacionado con el tratamiento de la obesidad y sus consecuencias se calculó en siete mil 800 millones de dólares.

 

La atención de ambos factores de riesgo, obesidad y sobrepeso –prevención y consecuencias– en el sector público y privado es costosa, a tal grado que las instituciones están rebasadas, en cualquier país, aseguraron en una entrevista colectiva.

 

La obesidad favorece el desarrollo de patologías graves como diabetes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer; también tiene impacto negativo en la fertilidad, al detonar alteraciones reproductivas.

 

Estos efectos podrían ser adquiridos durante el desarrollo embrionario y manifestarse en generaciones posteriores, señalaron estos expertos del Departamento de Embriología y Genética de la Facultad de Medicina de la UNAM.

 

Por ello, los universitarios desarrollan una línea de investigación encaminada a determinar el papel transgeneracional de esa condición y su implicación en los trastornos de la fertilidad y del metabolismo.

 

La obesidad tiene repercusiones en la fertilidad debido al estrés oxidativo, el estado proinflamatorio crónico y los trastornos en la regulación hormonal del eje hipotálamo-hipófisis-gónada.

 

Además, indicaron, se relaciona con afectaciones al desarrollo de los espermatozoides y del ovocito, e influye en el éxito de la implantación del óvulo fecundado; incluso perjudican el desarrollo del producto en la etapa intrauterina y posnatal.

 

René Escalona destacó que la obesidad es uno de los principales factores de riesgo para adquirir el síndrome de ovario poliquístico, tener menor potencial reproductivo y dificultades para concebir o perder el producto.

 

 

“Todos los aspectos de la reproducción se ven directamente afectados por el sobrepeso, desde el ciclo hormonal hasta la implantación”, agregó este especialista.

 

En tanto, Haydée Lugo explicó que para identificar factores involucrados en la señalización de la leptina, hormona producida por los adipocitos (células grasas), presente también en el hipotálamo, ovario y placenta, se utiliza en laboratorio un modelo animal de obesidad para estudios transgeneracionales.

 

“Esto permitirá sentar las bases para el diseño de estrategias terapéuticas personalizadas y dirigidas al restablecimiento de la tasa de fertilidad de personas con sobrepeso y obesidad”.

 

Además, el carácter transgeneracional del estudio hará factible pronosticar los efectos de la leptina en la fertilidad de generaciones nacidas de madres o padres obesos, destacó Lugo.

 

A los animales del modelo biológico se les induce obesidad mediante una dieta alta en grasas, después son apareados con animales control y su progenie; hijos y nietos, se alimenta con una dieta “normal”, es decir equilibrada.

 

“Creemos que las modificaciones en los parámetros de fertilidad en padres obesos serán transmitidas a las siguientes dos generaciones durante el proceso de gestación”, añadió esta especialista mexicana.

 

Para estos médicos universitarios los efectos de la obesidad no sólo dependen de la transmisión directa de los genes, sino de los mecanismos epigenéticos; es decir, de componentes que modulan la expresión de los genes y que pueden transmitirse de una generación a otra.

 

Carlos Larqué comentó que se desconoce cómo prevenir o revertir las alteraciones de estos mecanismos epigenéticos, por eso, uno de los objetivos del estudio es probar cuáles se presentan en los padres y se heredan a la progenie, aunque ésta se alimente de manera sana.

 

Haydée Lugo remarcó que se pretende demostrar que estos efectos pasan de generación en generación, “aunque no sabemos hasta cuál de ellas. Hemos planteado que es posible que trascienda hasta la tercera, aunque hay estudios que consideran hasta los biznietos”.

 

Aunque todo lo que se ha visto al respecto es en modelos animales, con muchas variables, esta línea de investigación de estos especialistas de la UNAM permitirá obtener un mapa de los cambios mencionados para procurar revertir el problema y proyectar a futuro políticas públicas de prevención y atención.

Please follow and like us: