Aumenta la depresión entre los adultos mayores

Aumenta la depresión entre los adultos mayores

  • En los Estados Unidos cada 90 minutos  se suicida una persona adulta mayor
  • “Ellos tienden a tener problemas de salud o incapacidades, dolor crónico, soledad y aislamiento social, pérdida y duelo, además de pérdida de estatus financiero”
  • En Florida, estado habitado por muchos jubilados, United HomeCare ahora requiere que todos los trabajadores sociales hagan una evaluación de depresión cuando visitan a un paciente mayor por primera vez

Depressed elderly man lost in thought

Julie KAY, Especial/Miami Herald

Florence Wechsler, residente de Sunrise, tiene muchas razones para estar deprimida. Perdió a su esposo hace dos años y medio, sus dos hijos viven en diferentes lugares del país –en Nueva York y en California–, y no tiene familia cerca.

Pero la octogenaria rehúsa dejarse vencer. Wechsler hace natación de tres a cuatro días a la semana, juega a los bolos dos veces a la semana, juega mah-jongg dos veces a la semana, hace trabajo voluntario de tutoría a niños los lunes y miércoles en la mañana, se reúne con amistades todos los sábados en la tarde para ir al cine y asiste al ballet cuando es temporada.

“Me gusta estar con otras personas”, dice Wechsler. “Me gusta la gente. Por supuesto, me siento desanimada muchas veces. Es entonces cuando me pongo en movimiento”.

Shelley y Alan Stieb, residentes en Hollywood, siguen la misma receta para la felicidad: mantenerse ocupados y social y físicamente activos. Desde que se mudaron de Nueva York a Florida hace más de una década, se metieron de lleno al activismo político y social. Alan, de 70 años, es presidente de su condominio. Shelly, de 69 años, es integrante de la Liga de Mujeres Votantes. Ambos son parte de la junta de la Asociación Cívica de Hollywood Beach y son capitanes de precinto del Comité Ejecutivo Democrático de Broward. También hacen caminatas regulares en el Hollywood Beach Broadwalk (malecón de Hollywood Beach).

De acuerdo con los expertos, estos adultos mayores del sur de Florida están haciendo todo bien. Pero eso no significa que representen la mayoría.

De acuerdo con los expertos, la depresión es casi una epidemia para la población de adultos mayores, afectando a 6.5 millones de personas de 65 años o más. El 25 por ciento de los pacientes atendidos por United HomeCare, agencia sin fines de lucro para el cuidado de la salud en el hogar y que ofrece servicio en el sur de Florida, tiene un diagnóstico de depresión, de acuerdo con Marina Bravo, trabajadora social certificada que labora en la agencia.

Aún más problemático para los trabajadores sociales y gerontólogos: la tasa de suicidio de las personas de edad avanzada es el más alto en cualquier grupo de edad. De acuerdo con expertos, el promedio es de un suicidio cada 90 minutos entre los adultos mayores. La mayor proporción de suicidios en ese grupo de edad ocurre en hombres blancos.

“Las personas de edad avanzada tienen el mayor nivel de factores de riesgo para depresión”, señala Bravo. “Ellos tienden a tener problemas de salud o incapacidades, dolor crónico, soledad y aislamiento social, pérdida y duelo, además de pérdida de estatus financiero. Tienen que combatir muchas cosas”.

La Dra. Clara Álvarez, psiquiatra y directora de Memorial Regional Outpatient Behavioral Center (centro de conducta para pacientes externos de Memorial Regional), menciona que también influye el hecho de que no cuentan con  un sistema de apoyo, ya que muchos de sus familiares viven en otros estados.

“Tenemos más y más pacientes de edad avanzada viviendo solos”, dice. “Estamos viviendo más y también los hijos se mudan, además de que las personas tienen menos hijos”.

Con más y más personas de la generación de la posguerra (baby boomers) convirtiéndose en adultos mayores, ese grupo de edad se ha convertido rápidamente en el segmento más grande de la población, siendo la depresión una prioridad para los profesionales de la salud. El problema es de particular importancia en el sur de Florida, donde cientos de miles de retirados de mayor edad se han mudado para disfrutar lo que se supone sean los años dorados pero que a menudo se convierte en lo opuesto.

Mientras que los médicos, trabajadores sociales y trabajadores de cuidado de salud en el hogar se enfocaban previamente en las muchas quejas físicas de las personas de edad avanzada, ahora están comenzando a evaluarlos para problemas psicológicos como la depresión. Por ejemplo, United HomeCare ahora requiere que todos los trabajadores sociales hagan una evaluación de depresión cuando visitan a un paciente mayor por primera vez.

“Anteriormente buscaban diabetes y presión sanguínea alta, pero ahora reciben adiestramiento para identificar depresión”, menciona Bravo.

En el pasado, los trabajadores sociales podían hacer a los adultos mayores una pregunta sobre si se sentían deprimidos. Ahora se han dado cuenta de que no es suficiente porque los pacientes pueden no identificar que están deprimidos. En su lugar, los trabajadores del cuidado de salud en el hogar hacen preguntas específicas diseñadas para detectar síntomas de depresión, tales como si el paciente ha tenido problemas para dormir, algún cambio en el apetito, aumento en el uso de drogas, si sienten que son una carga para las familias, si han experimentado pérdida de concentración y si han estado hablando sobre terminar con su vida.

A los pacientes se les asigna un número de acuerdo a una escala numérica para la depresión, que entonces utilizan los médicos para determinar si se debe recomendar tratamiento.

Álvarez está de acuerdo en que la depresión entre las personas de edad avanzada se diagnostica mejor ahora. Ella estima que dos terceras partes de sus pacientes mayores de 60 años son diagnosticados con depresión clínica.

“Los médicos primarios se están involucrando más en la evaluación para la depresión”, dice Álvarez.

Antes de prescribir tratamiento para la depresión en adultos mayores, hay que descartar condiciones físicas que pueden enmascararse tras una aparente depresión como lo son la enfermedad de Alzheimer, Parkinson, hipertensión y enfermedades del riñón.

Sin embargo, una vez que se diagnostica depresión clínica, hay una cantidad de tratamientos disponibles que son similares a los disponibles para pacientes más jóvenes.

A menudo se prescriben antidepresivos que hoy día tienen muchos menos efectos secundarios que los de hace unos años. Por lo tanto, pueden ser mejor tolerados por las personas de edad avanzada que a menudo toman muchas medicinas. Álvarez dice que trata de comenzar con dosis bajas y prescribe solo una en lugar de dos o tres, ya que la función del hígado en los adultos mayores puede afectarse más que en los pacientes jóvenes.

A otras personas se les anima para que aumenten su actividad social, quizás visitando uno de los centros de adultos mayores en el sur de Florida. Estos centros a través de los condados de Miami-Dade y Broward, ofrecen una variedad de actividades y clases. Las bibliotecas locales también ofrecen actividades para estas personas tales como meditación, yoga y clases de computadora.

Bravo y otros trabajadores sociales a menudo les motivan para que adquieran una mascota.

“Todo el mundo necesita un propósito”, expresa. “Puede ser algo tan sencillo como dar de comer a un perro todos los días”.

Los expertos alientan a las personas de edad avanzada a realizar ejercicio diario que, como en las personas más jóvenes, ha probado liberar endorfinas que levantan el ánimo. Las formas livianas de ejercicio son clave para los adultos mayores, como es el caminar o el tai chi.

Finalmente, una dieta saludable y dormir lo necesario pueden ser un antídoto para la depresión, según los expertos.

Por su parte, Stieb anima a los adultos mayores a no usar la enfermedad o la incapacidad como excusa para fomentar la depresión o apagarse. Él sufre de dolor crónico y camina con bastón luego de sufrir un accidente en el trabajo hace 26 años, cuando se cayó de una escalera y se destrozó la rodilla, se fracturó la espalda y sufrió una lesión en la cabeza. Shelley también lucha con el dolor debido a problemas severos con las encías.

“Sentía lástima por mí y un hombre mayor me dijo, ‘Considérate afortunado. Ahora puedes trabajar por otros y hacer labor voluntaria”’, recuerda Steib. “Eso me ayudó mucho”.

Shelley añade: “Aconsejo a las personas de edad avanzada que caminen, que vayan a la YMCA, que visiten uno de los muchos parques en el sur de Florida, vayan a un centro comunitario y tomen una clase o tomen una clase de yoga de la risa. O camine en Hollywood Broadwalk. Siempre hay alguien con quien hablar”.

PROGRAMAS PARA ADULTOS MAYORES

MDPROS se ha unido a Walgreens para presentar Healthy Choices Clinics en los 14 Active Older Adults Recreation Hubs. Las clínicas proveerán análisis de presión alta, glucosa y colesterol. También proveerán vacunas para el flú, pulmonía y culebrilla. Más información: 786-372-9701.

Retired and Senior Volunteer Program (RSVP)

El Programa de retirados y voluntarios (The Retired and Senior Volunteer Program (RSVP)) actúa como centro de oportunidades para personas de 55 años o mayores de manera que puedan hacer uso de sus telantos, destrezas y experiencia para ayudar a otros. Más de 1,000 RSVP voluntarios sirven a 79 agencias y organizaciones a través del Condado de Miami-Dade. Más información: 786-469-4851 o en sus oficinas en 701 NW First Court, 11 piso, Miami.

Acompañante para otro Senior

El programa provee a los participantes la oportunidad de enriquecer su vida ayudando a otros Seniors que no se pueden valer por sí mismos. Las solicitudes son en inglés y español. Más información: 786-469-4851 o en sus oficinas en 701 NW First Court, 11 piso, Miami.

Clases de entrenamiento

Las clases combinan los componentes claves de cualquier entrenamiento: fortaleza, flexibilidad y condicionamiento cardio. Cada clase es de una hora y se lleva a cabo tres veces a la semana. Las mismas se llevan a cabo en diferentes centros de entrenamiento en los parques de Miami-Dade. Más información: http://www.miamidade.gov/parks/active-adults.asp o 786-372-9701.

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