Por la violencia, la visita de Bergoglio para consolar a la población católica

•  “El Papa viene a jugar un papel de mediador, de contención”, afirmó Bernal Álvarez.
• El Estado mexicano asume un papel neutral, equidistante

En el contexto de violencia que vive el país para la maestra Yolanda Bernal Álvarez, académica de la Facultad de Psicología de la UNAM, la visita del Jorge Mario Bergoglio, el Jefe del Estado Vaticano a México cumple un  papel de mediador, de consuelo, de esperanza y tranquilidad  para la población católica mexicana y así enfrentar la adversidad en que vive.

“El Papa viene aumentar sus sueños”, dijo la maestra de la Facultad de Psicología de la UNAM, quien mencionó el caso de los jóvenes, quienes con pocas posibilidades de desarrollo económico, laboral, profesional se acercan a la religión como mecanismos de autodefensa frente a las adversidades.

La maestra Bernal Álvarez no desechó que el Jefe de la Iglesia de Roma represente los vínculos con la política, los negocios y la mafia por los escándalos financieros que ha vivido el Estado Vaticano.

La maestra en psicología junto con el historiador Jorge TrasLosheras ofrecieron una conferencia de prensa en el Instituto de Investigaciones Históricas en Ciudad Universitaria para hablar sobre la visita de Bergoglio, llamado el “Papa Francisco”, quien llegará a México el viernes 12 de febrero de 2016.

Bernal Álvarez habló desde el punto de vista psicológico de la visita al país de  Bergoglio, sobre los mecanismos de compensación que  para la población católica representa su llegada, como alivio a la situación de corrupción, violencia y narcotráfico que vive México.

La visita del “Papa Francisco”, explicó la maestra en psicología,  influye en las condiciones psicosociales de una población que vive en situaciones sociales difíciles, cuando lo ven como “representante de Dios en la tierra”. Habló del perfil sociocultural de las personas que van a ir a ver al “Papa”, personas de bajos recursos o de altos recursos económicos, no la clase media intelectual.

“Es un elemento que permite enfrentar la adversidad, ser un consuelo”, dijo la maestra Bernal Álvarez. ¿Qué papel juega la visita del Papa?, se preguntó la académica universitaria. “Efectivamente somos un país declaradamente laico, pero también ocho de cada diez mexicanos son católicos”.

“El Papa viene a jugar un papel de mediador,  de contención, de promesa”, afirmó Bernal Álvarez, quien destacó que el hecho de que Bergoglio sea latino y hable español favorece esa identificación con la población católica.

Por su parte, el historiador  Jorge TrasLosheras rechazó que la visita de Bergoglio represente un cuestionamiento al Estado Laico en México, aunque reconoció que el  debate se encuentra en la naturaleza del Estado laico.

TrasLosheras reconoció que la visita de Bergoglio ha provocado “cierta inquietud” en ciertos círculos intelectuales. Estamos ante uno de los debates más largos en la historia de México, que es la relación entre la Iglesia Católica y el Estado y hoy en día entre las iglesias y el Estado.

Un debate que inició antes del presidente Benito Juárez y que se ha tratado de resolver, que desde la opinión del historiador la encrucijada del Estado laico ya se ha estado resolviendo.

Asimismo,  el historiador habló de la separación del Estado y la iglesia que declaró Juárez, de la Constitución de 1917 que desconoce la existencia de las iglesias, de la persecución de “1914 a 1938”. “No ha sido fácil”, añadió. Sin embargo, dijo, las cosas han cambiado mucho desde la Constitución del 17.

“Hoy nadie cuestiona la laicidad del Estado Mexicano, nadie en sus cabales  en su sereno juicio puede cuestionar la importancia de que el Estado Mexicano sea laico. Lo que sí está a debate es la naturaleza  de la condición del estado laico.

Con dos posturas importantes, TrasLosheras lo explicó.Por un lado, dijo el historiador,  “hay quienes consideran al Estado laico desde una posición laicista,  de que las religiones deben ser relegadas  a la observancia estricta de la vida privada, sin posibilidad de hacerse presentes  en el espacio público y no deben  hacerse presentes”.

Por otro lado, agregó, hay quienes se colocan en la laicidad propositiva, en la cual  el Estado se manifiesta neutral frente a todas las religiones, un Estado equidistante, un Estado aconfesional que está decididamente a favor de los derechos humanos dentro de la vía democrática y plural, y que entre esos  derechos humanos, se encuentre el derecho a la libertad de religión.

Por lo tanto, manifestó, las religiones ya forman parte normal de la sociedad civil y con el derecho a manifestarse.

En México, en opinión del historiador, se ha optado por la posición de un Estado neutral, equidistante, un Estado de laicidad propositiva. Y menciona las reformas de 1992 que reconocieron jurídicamente a las iglesias que colocan al Estado Mexicano en esa posición de neutralidad.

El historiador dijo que esta visita del representante del Estado Vaticano representa una oportunidad  para fortalecer a la sociedad civil y disminuir “las tentaciones autoritarias” y destacó la pluralidad religiosa y diversidad de creencias que caracteriza a la población mexicana actual, sin dejar de hacer notar que la mayoría de la población es católica.