Mientras persista la corrupción y la impunidad poco se podrá avanzar en derechos humanos

La Comisión de Derechos Humanos de la capital mexicana emprendió un modelo de defensa de los derechos humanos de justicia restaurativa. “Es un hito” para la vida de los organismos dedicados a defender uno de los derechos consagrados en la Constitución de la República.

La Comisión de Derechos Humanos de la capital mexicana emprendió un modelo de defensa de los derechos humanos, llamada justicia restaurativa, la cual “es un hito” para la vida de los organismos dedicados a defender uno de los derechos consagrados en la Constitución de la República.

Desde la primera Recomendación, la 1/2018, la actual presidenta de esa Comisión, la doctora Nashieli Ramírez Hernández, se empezó a plantear en el organismo “ese sistema de reparación integral, medidas de satisfacción, de no repetición” en los casos de violaciones a los derechos humanos.

“Y estas cuestiones- agregó- no avanzan, digamos, en eso y el tema como feminicidio, violencia contra las mujeres, evidenciando un montón de cosas que siguen siendo como una constante de la lucha por los derechos humanos y es la impunidad y la corrupción”.

Mientras eso persista poco podremos avanzar, dijo la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México en una reunión con reporteros de la fuente en la sede de ese organismo.

Con ese modelo de “justicia restaurativa” esta Comisión busca ser más expedita en la atención de las quejas que presentan los habitantes de la capital por diversas violaciones a sus derechos humanos y evitar el largo y sinuoso camino de las Recomendaciones que esta Comisión hace a las autoridades de la Ciudad de México desde que se fundó hace 25 años.

Este modelo de defensa de los derechos humanos que anunció la presidenta de ese organismo, Nashieli Ramírez Hernández, en un desayuno de fin de año con reporteros de la fuente de ese organismo “tiene que ver con cómo plantear la defensa”.

“ Si la defensa nada más la hago aquí, investigando y acreditando o la defensa la hago ahí mismo en el territorio y conciliando. Entonces creo que sí es un hito, digamos, en términos no nada más de lo que era la Comisión, sino también lo que generalmente hacen las Comisiones de Derechos Humanos”, dijo Ramírez Hernández en respuesta a una pregunta.

Para el próximo año, Ramírez Hernández se ha planteado continuar una estrategia contra la impunidad en los casos de las quejas por distintas violaciones a los derechos humanos por la tardanza en reparar los daños que se causan a las víctimas de violaciones a sus derechos humanos, como el caso New’s Divine, de una discoteca donde fallecieron menores de edad y sus familiares no han visto justicia desde hace una década.

El 20 de junio de 2008, durante un desalojo efectuado por miembros de la seguridad pública capitalina a una discoteca ubicada en el norte de la Ciudad de México, fallecieron 12 personas asistentes a ese centro musical y otras 16 resultaron heridas. Las víctimas, adolescentes, festejaban la tarde de ese 20 de junio el final de un ciclo escolar de educación secundaria.

Esas muertes de adolescentes en su mayoría ocurrieron durante el gobierno capitalino de Marcelo Ebrard, que ahora es el canciller del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador. Para los familiares de las víctimas, esas muertes de adolescentes permanecen impunes y han demandado justicia todos estos años.

La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos se refirió al largo camino que tienen que transitar las Recomendaciones que emite ese organismo para reconocer los daños a las víctimas, como el dolor y la pena de los familiares de esas víctimas del New’s Divine” y no exista impunidad.

La Comisión de Derechos Humanos de la capital sostuvo que la policía realizó detenciones arbitrarias, abusos sexuales, vejación y se llegó al extremo de cometer excesos, un caso en el que hubo dilación en los procesos para buscar a los responsables de esa tragedia de 2008.

La policía capitalina de ese entonces se dedicó a criminalizar a las víctimas tratándolos de “delincuentes, drogadictos y alcohólicos”.

Para los familiares de las adolescentes víctimas el caso sigue impune a una década de distancia.

Nashieli Ramírez Hernández se refirió a este caso donde los familiares “no ven justicia”.

A lo largo de la vida de esta institución ha recibido principalmente quejas en contra de los organismos de seguridad pública, de la Procuraduría General de Justicia, de los servicios de salud y en contra de la secretaría de Desarrollo Social, mencionó esta defensora de los derechos humanos de la población de la capital mexicana.

Pero en este contexto sobresalen las quejas contra el más temido de los cuerpos policiacos, el de los granaderos que han servido de instrumento de represión y contención de las manifestaciones públicas, que la primera Jefa de Gobierno de la capital, Claudia Sheinbaum, se ha comprometido desaparecer a partir de la primera hora del año 2019, una demanda que se hizo desde las represiones a estudiantes de este cuerpo policiaco en 1968.

La Comisión de Derechos Humanos capitalina ha recibido 355 quejas contra las acciones del Cuerpo de Granaderos, de las cuales están abiertas todavía en investigación, 113; y concluidas 242. Solamente en lo que va del año 2018 se han presentado 65 quejas, de las cuales están en trámite o en investigación 46.

Por otra parte, en esa reunión con reporteros, Ramírez Hernández dijo que se mantiene en su agenda a las personas mayores, una de las poblaciones más vulnerables de la capital, víctimas de pobreza, abandonos, diversos tipos de violencia física, despojo y abandono.

Reconoció que en las instituciones a las que se envían las recomendaciones para reparar o corregir violaciones a los derechos humanos, les “han visualizado omisiones graves y violaciones graves de derechos humanos, cuestiones que tiene que ver con corrupción”.

Es el problema que enfrenta esta Comisión, es que las instancias de gobierno no están en esa tarea. Esa es la verdad, dijo Ramírez Hernández.

Y añadió: “Entonces, este año, por eso, y parte del que entra, vamos a tener mucho más consolidado el Programa de Lucha Contra la Impunidad; y entonces lo que tú haces es decir ‘bueno, no me están haciendo caso, o te estoy señalando que esa persona hace y repite y vuelve a repetir, y está documentado…”