Osteoporosis, una enfermedad subestimada

Osteoporosis, una enfermedad subestimada

 

  • Sin síntomas ni dolor se detecta cuando ya es incapacitante
  • Necesario hacerse densitometrías óseas  periódicamente

 

Elda Montiel

En México 5.4 millones de mujeres sufren de osteoporosis y en el próximo lustro el número se incrementará en un millón 200 mil, según estudios de la Secretaría de Salud y el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).

En el marco del Día Mundial de la Osteoporosis que se conmemora el  20 de octubre, el doctor Jesús Fernando Pérez Velasco del Centro de Especialidades Médicas Integradas (EMI),  precisó que este padecimiento no tiene síntomas ni presenta dolor y la mayoría de los casos se detecta hasta que está en etapa avanzada, por lo regular cuando el afectado sufre una fractura, de ahí la importancia de realizarse estudios de densitometría ósea periódicamente.

De acuerdo a la Asociación Mexicana de Metabolismo Óseo y Mineral A.C., (AMMOM) una de cada tres mujeres y uno de cada cinco hombres mayores de 50 años sufrirá una fractura por osteoporosis en lo que les queda de vida. A nivel mundial, se estima que se produce una fractura osteoporótica cada tres segundos, una fractura vertebral cada 22 segundos. La incidencia varía de país a país y dentro de los grupos étnicos.

La osteoporosis puede afectar a personas de todas las edades, pero es mucho más común en hombres y mujeres mayores. Cerca del 75% de las fracturas de cadera, vertebrales  y de muñeca se producen entre personas de 65 años o más. Las mujeres son más propensas a padecer osteoporosis debido a la acelerada pérdida de densidad ósea por la caída de los niveles de estrógeno en los años que siguen a la menopausia.

Disminución de la masa ósea

La osteoporosis, caracterizada por la disminución de la masa ósea, es una enfermedad debilitante en la que las personas pierden el calcio de los huesos con la consecuencia de mayor riesgo de fracturas por fragilidad ósea. El hueso es un tejido vivo. El hueso existente constantemente es reemplazado por hueso nuevo. Todo el esqueleto es reemplazado aproximadamente cada 10 años. La osteoporosis se presenta cuando el organismo no es capaz de producir suficiente hueso nuevo y también cuando demasiado hueso existente es reabsorbido por el cuerpo o por ambas razones combinadas.

Se puede sospechar de osteoporosis si ha habido encorvamiento o disminución importante en la talla de la persona. El diagnóstico es mediante un estudio simple y no doloroso llamado densitometría ósea, que mide la cantidad de tejido óseo que hay en una región específica del cuerpo, habitualmente el cuello del fémur (cadera) y la región lumbar de la columna vertebral

De acuerdo con el especialista Pérez Velasco, la nutrición, la actividad física y la genética son algunos de los factores para el desarrollo de la osteoporosis. Así como el consumo excesivo de alcohol, tabaco, refresco y cafeína, esta última relacionada con la pérdida de calcio en la orina, así como sedentarismo y deficiencias en la nutrición. De acuerdo con el especialista, a partir de los 30 años la densidad ósea comienza a disminuir alrededor de 8.0 por ciento por década, por lo que la mayoría de los casos se detectan en una etapa avanzada.

El tratamiento para la osteoporosis puede abarcar: cambios en el estilo de vida, como la dieta y el ejercicio. Tomar calcio y vitamina D. Usar medicamentos  para fortalecer los huesos.

La Fundación Internacional de Osteoporosis (IOF) organiza el Día Mundial de la Osteoporosis el 20 de octubre de cada año, desde 1996, para concientizar a la personas sobre la prevención, diagnóstico y tratamiento de esta enfermedad a través de campañas desarrolladas por sociedades nacionales de pacientes con osteoporosis de todo el mundo y actividades diversas  en más de 90  países.

En la  actualidad, de acuerdo con  datos de esta fundación, el 82% de los hombres en México  subestiman su riesgo ante la osteoporosis, por lo que advierte que hay que prestarle atención a esta enfermedad, que no tiene género de exclusividad, que afecta tanto a mujeres como a hombres,  y que de no atenderse oportunamente, mediante la realización periódica de densitometrías óseas,  puede convertirse en un problema de salud pública en nuestro país.

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