El insomnio es el mal del siglo XXI: afecta más a las mujeres mexicanas
El insomnio es el mal del siglo XXI: afecta más a las mujeres mexicanas
- El insomnio es el mal del siglo XXI: afecta más a las mujeres mexicanas
- Las dos sedes de la Clínica de Trastornos del Sueño de la UNAM, en el Hospital General de México y Ciudad Universitaria, cuentan con un equipo de trabajo multi e interdisciplinario para atender este mal: Ulises Jiménez Correa, director de la Clínica de Trastornos del Sueño de la UNAM
- Padece la población ‘fase atrasada del sueño y alteración del ciclo del sueño’
- El 18 de marzo se celebra el Día Mundial del Sueño
¿Dejó de ser la vida un sueño? En el siglo XVII Pedro Calderón de la Barca escribió que “la vida es sueño”. Tres siglos después el 18 de marzo se conmemora el Día Mundial del Sueño, que consiste en una campaña convocada por la Asociación Mundial de Medicina del Sueño para promocionar la salud del buen dormir, una reparación del cuerpo y de la mente difícilmente de cumplir dado la complejidad de la vida urbana, el desempleo, la contaminación, las enfermedades, las incertidumbres de nuestro tiempo.
¿No concilia el sueño al menos tres noches en una semana como mínimo? Ulises Jiménez Correa, director de la Clínica de Trastornos del Sueño de la UNAM, recomienda acudir a quienes padecen este fenómeno más acentuado del siglo XXI, a un centro especializado después de señalar que el insomnio es el trastorno más común de las enfermedades del dormir, un problema que no se resolverá de manera espontánea.
Dormir bien es una acción difícil para el 45 por ciento de la población global, según la Organización Mundial de la Salud. En México, el insomnio es más frecuente en mujeres que en hombres, con una proporción de dos a uno, situación que tiene que ver con factores hormonales (como la menopausia y el síndrome premenstrual) y psicológicos, dice Jiménez Correa.
Los estilos de afrontamiento y la personalidad de ellas, quienes se preocupan “más por ciertas cosas”, también “las hace más proclives a padecerlo”, explicó el especialista.
El segundo problema que detecta este experto son los ronquidos y la apnea, pausas respiratorias durante el sueño. Los varones mexicanos tienen más trastornos respiratorios del sueño. “Somos dos a uno más roncadores y tenemos más dificultades con la apnea”, reiteró.
Los ronquidos, agrega, son el ruido que se genera con el paso forzado del aire durante la respiración, que está parcialmente cerrada sin llegar a la obstrucción. Se estima que alrededor del 30 por ciento de los hombres los sufren.
Aunque los trastornos del sueño también dependen de la edad, existen perturbaciones menos frecuentes, como rechinar los dientes, caminar o presentar conducta sexual, alimenticia o violenta mientras se duerme. En general, a este conjunto de padecimientos se les conoce como parasomnias, explica durante una entrevista Ulises Jiménez.
Además, dice, algunos adolescentes y adultos jóvenes sufren el denominado síndrome de fase atrasada de sueño, que consiste en no tener un horario adecuado y constante para ese descanso, dormirse y levantarse muy tarde.
“Quienes no tienen ocupaciones bajo un horario o que no necesitan levantarse temprano, que están hasta las tres o cuatro de la mañana en la computadora o en Internet, invierten su ciclo del sueño”, advierte.
Otro síndrome de importancia entre adultos jóvenes es el de sueño insuficiente. Aquí se contempla a la gente que tiene que despertar temprano para ir a la escuela, a trabajar o para realizar otras actividades; llegan a casa de noche para hacer tareas y se duermen muy tarde; entonces, durante el día tienen mucho sueño.
Recomendaciones para tener un sueño de ensueño
Según Jiménez Correa, llevar a cabo los siguientes pasos puede conducir a un “sueño de ensueño”:
Tener un horario regular para acostarse y levantarse. Activarse temprano de manera habitual, aunque se duerma mal, pues eso ayudará a hacerlo mejor la siguiente noche. Realizar actividad física al menos tres veces por semana, preferentemente intensa y por la mañana. Prescindir del consumo de café o alcohol antes de ir a descansar, porque pueden provocar reflujo, ronquido y sueño de mala calidad.
Las dos sedes de la Clínica de Trastornos del Sueño de la UNAM, en el Hospital General de México y Ciudad Universitaria, cuentan con un equipo de trabajo multi e interdisciplinario, que incluye a psiquiatras, psicólogos, neurólogos –pediatras y para adultos–, otorrinolaringólogos, geriatras, odontólogos y neumólogos; así se canaliza al paciente con el especialista adecuado.
“Realizamos unos 100 estudios de sueño nocturnos al mes en las dos unidades y otros 50 diurnos; además, atendemos entre 400 y 500 consultas de pacientes con trastornos del sueño”, precisa el universitario al reiterar su invitación a quienes sufren los males del insomnio a acudir a esos centros de atención a quienes lo padecen.