Nueve consejos para no comer en exceso
Nueve consejos para no comer en exceso
- Pintar las paredes de color azul y escuchar tus sonidos al comer…
Ryan ELDER
Comer en exceso es una de las principales causas de diversos malestares como indigestión o dolor estomacal, así como el inicio de enfermedades como la obesidad o diabetes, por lo que hay que prevenirlo.
Aunque en ocasiones sea difícil controlar la ingesta de alimentos ya sea por hambre, antojo, ansiedad o sólo costumbre, la realidad es que es sencillo. Todo depende de autocontrol y algunos trucos como los que te decimos a continuación.
Escucha los sonidos que emites al comer
Científicos de la Universidad Brigham Young en Utah, Estados Unidos, publicaron un estudio sobre el efecto de los sonidos en la comida, lo que influye en la cantidad de alimentos consumidos.
Los investigadores realizaron tres experimentos, y a todas las personas que se sometieron al estudio se les dieron alimentos crujientes, como pretzels y galletas, pero algunos usaron audífonos para escuchar música a un volumen alto, mientras comían.
De acuerdo con el estudio, se observó que las personas que podían escucharse masticar comían 30% menos que las personas que no podían.
“Típicamente, se etiqueta al sonido como el sentido olvidado de los alimentos, pero si la gente está más enfocada en el sonido que hacen los alimentos, podría reducir su consumo”, dijo el autor del estudio
Come alimentos crujientes
El llamado “efecto crujiente”, según los científicos, puede ayudar a reducir las cantidades de comida que consumen las personas.
Pinta de azul las paredes de la cocina o el comedor
La revista de decoración de interiores Contract halló que cuando organizaron un buffet en tres habitaciones de diferente color, los invitados de la habitación azul eran menos propensos a comer.
Comprar platos, servilletas o manteles azules
Se tiene el mismo efecto que el de las paredes.
Utiliza un tenedor más grande
En 2011, se publicó un estudio en el Journal of Consumer Research, en el que se usaron dos tamaños de tenedores en un popular restaurante italiano para medir cuándo comía la gente.
Se encontró que quienes utilizaron los tenedores más grandes comieron menos que los participantes con los tenedores más pequeños.
Usa platos y tazones pequeños
Otro estudio publicado en 2012 reveló que la razón por lo que la gente se sirve considerablemente menos en tazones pequeños es la ilusión Delboeuf, un truco mental que tiene que ver con círculos de diferentes tamaños.
La teoría es que con un plato grande, el anillo que rodea a la comida se ve más grande, y esto hace pensar que se come menos de lo que realmente se hace; mientras con un plato pequeño, sucede lo contrario, el anillo visible del plato parece más pequeño y esto hace pensar que se come más de lo que realmente se hace.
Come con tu mano no dominante
Asimismo, psicólogos de la Universidad del Sur de California descubrieron que comer con la mano menos dominante puede ayudar a reducir el número de calorías consumidas.
En un estudio, dieron una cubeta de palomitas a 98 personas que asistían al cine y hallaron que las personas a las que se les dijo que usaran su mano menos dominante consumieron 30 por ciento menos comida que los que no lo hicieron.
El autor del estudio, David Neal, concluyó que la inconveniencia nos hace reevaluar si ese enésimo bocado o puñado realmente vale la pena y, gran parte de las veces, decidimos que no lo es.
Escucha música suave
No debe ser tan fuerte para que no se opaque el sonido de tu propia masticación, lo cual invita a los comensales a masticar más despacio, de acuerdo a un estudio publicado por la Universidad Comell.
Brian Wansink, profesor de Ciencias de la Nutrición dividió un restaurante en dos secciones, y puso música tipo ‘comida rápida’ de un lado y música más suave del otro lado.
La música suave desestresaba a los comensales y les permitía dominar la velocidad de su patrón de alimentación normal. Además, hacerlo crea un ambiente de relajación que evita que las personas se atiborren de comida al ritmo de la música.
Toma agua antes de cada comida
El año pasado especialistas de la Universidad de Birmingham descubrieron que los adultos con obesidad que tomaban 500 mililitros de agua simple antes de cada comida, perdieron un promedio de 9.5 libras (4.30 kilogramos) en 12 semanas.
Los datos publicados en el boletín Obesity, fueron considerados como altamente benéficos, y se invitó a profesionales de salud y encargados de campañas de salud pública a promoverlos.
La conclusión es que la ciencia es sencilla: al llenar el estómago, se requerirá de menos comida para lograrlo, además, después de consumir menos calorías durante las comidas, simplemente se desecha el agua y se obtienen los beneficios de un truco muy sencillo.
(Con información de Notimex)