Mantienen el carácter universal de la Tarjeta  de Pensión Alimentaria

• La entregará Mancera Espinosa a quien la necesite.
• En la delegación de la clase pudiente de la ciudad, entrega Amieva Gálvez ese Derecho a 102 Personas Adultas Mayores

Al mediodía, bajo un sol del cambio climático, en  el atrio de la iglesia de San Simón Ticumac, Dolores Báez García, de 34 años, una animadora comprometida con las personas adultas mayores de  voz cálida, celebra con las 102 personas de más de 68 años, nuevas  usuarias de la Tarjeta de Pensión Alimentaria, vecinas y vecinos de la delegación Benito Juárez que la hayan recibido después de dos años de espera.

Este grupo de personas de edad, esperaban al secretario de Desarrollo Social, José Ramón Amieva Gálvez, quien visitaba la casa de Ángel para entregarle en su domicilio la Tarjeta de Pensión Alimentaria, un artesano que fabrica peculiares juguetes en su carpintería, y quien este viernes 23 de octubre cumplió 70 años y lo festejaron con un “pastel”.

Amieva Gálvez, después de hacer esa visita y  otras dos a sendas  casas, para entregar  tres tarjetas alimentarias en ese barrio “casa por casa”,  es quien defiende con vehemencia el carácter universal de ese derecho; habló del esfuerzo financiero que hizo el gobierno de Miguel  Ángel Mancera Espinosa para lograr aumentar esa entrega.

Lo hizo, dijo, con la búsqueda de ahorros y suprimiendo gastos en su administración que le permitió elevar el número de esas solicitadas tarjetas para las personas adultas mayores residentes en  la Ciudad de México, aumentando de 480 mil   a  510 mil beneficiarias y beneficiarios, antes de que termine este año de 2015.

El servidor público dijo que “el jefe de Gobierno dispuso de los impuestos presupuestales para este ejercicio 2015, de alrededor de 127 millones de pesos y los destinó para ampliar el padrón de beneficiarios de 500 a 510 mil Personas Adultas Mayores”.

El gobierno de la Ciudad de México distribuye sin distinción de gobiernos ni ideología las Tarjetas de Pensión Alimentarias. Alcanzará a toda la ciudad, las trabajadoras sociales hacen un “barrido” para detectar quién la necesita. En la delegación Benito Juárez, que ha sido gobernada por el Partido Acción Nacional desde que se inauguró en el año 2000 la elección de los jefes delegacionales por voto directo, tiene 29 mil 34 personas beneficiadas,  19 mil 790 son mujeres y nueve mil 244 son hombres.

La población total de la delegación Benito Juárez es de 327 mil 643 habitantes y es de un mayor poder adquisitivo, en relación con otras delegaciones como Iztapalapa, Gustavo A. Madero o Iztacalco, donde residen los grupos vulnerables de  más dramáticas carencias de la capital.

En un tono coloquial,  Amieva Gálvez recordó  en la colonia San Simón Ticumac,  cuando al Jefe de Gobierno le dijeron que  en “la Benito Juárez está la clase pudiente, la clase rica de la ciudad” para oponerse a que la población de Personas Adultas Mayores de esta delegación recibieran ese beneficio.  “Y dijo el jefe de Gobierno, no, aquí  a todo adulto mayor, a toda persona adulta mayor que lo necesite, se  lo vamos a entregar y es por eso que estamos aquí”, recordó el secretario de Desarrollo Social.

“Es por eso que el día de hoy estamos aquí para entregar esa tarjeta  a la que todas y todos ustedes, por el hecho de ser mayores de 68 años y por vivir en la Ciudad de México, tienen acceso”, les manifestó el secretario de Desarrollo Social a las Personas Adultas Mayores, entre ellos Jesús Hernández Rosas, María Elena Casillas Méndez y Gerardo García López, quienes recibieron esa tarjeta por la cual tendrán un depósito de  mil 49 pesos cada mes y “sin falta”.

Momentos antes de la llegada de Amieva Gálvez a ese pequeño barrio, a un lado de la colonia Portales, la profesional de servicios a Adultos Mayores, como se declaró Dolores Báez, se dijo conmovida por el vigor, la energía que le han transmitido las Personas Adultas Mayores que ha conocido. Le impactó en una celebración, ver a todas las señoras bien vestidas, bailando danzón, presentando un baile regional, “las de la Colonia Narvarte”, cantando, recitando poesía, presentando obras de teatro.

A unas cuadras de ahí, en la calle de Saratoga 417, Dolores y dos de sus compañeras, Jaquelín López Estrada y Angelina Trejo Chora y otras trabajadoras sociales del gobierno de Mancera Espinosa,  cada miércoles, de 10 a 12 del día, atienden una Escuela para Personas Adultas Mayores, una escuelita, con el lema “juventud en la piel”, donde mujeres y hombres de más de 60 años reciben cursos de duelo, taichí; también  conviven, platican, cuentan sus experiencias, realizan convivencias, organizan viajes de turismo social.

“Somos sus acompañantes, sus historias nos enriquecen”, dijo esa entusiasmada profesional, una de las mil 200 educadoras que atiende cada una de ellas entre  500 y 700 personas mayores de 68 años. Estaba conmovida   del trato que recibe de las personas adultas mayores ante ese público de mujeres y hombres de más de 68 años que finalmente  ingresaron al Padrón de la Tarjeta de Pensión Alimentaria.

Dolores Báez García es una de las trabajadoras sociales entrenadas como cuidadoras por el Instituto para la Atención de los Adultos Mayores en el Distrito Federal, a cargo del maestro Luis Meneses, quien informó de la preparación teórica y práctica   de las primeras 217 egresadas que fueron capacitadas como cuidadoras de personas adultas mayores.

El secretario de Desarrollo Social dijo en una entrevista que se espera capacitar entre dos mil y tres mil cuidadoras de Personas Adultas Mayores para el año 2016. La mayoría de las 217 personas que recibieron  este adiestramiento son familiares, hijos, nietos, parejas, que adquirieron conocimientos y habilidades para acompañarlos, cuidar de su salud, detectar riesgos y padecimientos, y en general comprender esa etapa de la  vida y sus procesos, explicó el servidor público.

Amieva Gálvez, de 49 años de edad y quien en 15 años tendrá 64 años, hizo un pronóstico sobre el creciente envejecimiento de la población. Dijo que “en el 2030 vamos a ser más del 21 por ciento de personas adultas mayores de la ciudad y a partir del día de hoy tenemos que hacer esta ciudad habitable, disfrutable, querida, apropiada para las personas adultas mayores”.

“Yo siempre digo que la entrega de esta tarjetita que damos, es la oportunidad para que se pueda escribir un nuevo capítulo en la historia de las vidas de todas y todos ustedes y que sea un capítulo de felicidad, para eso estamos aquí”, dijo finalmente este medio día en el atrio de la iglesia San Simón, ante ese grupo de nuevos y nuevas derechohabientes de la Tarjeta de Pensión Alimentaria de la Ciudad de México el servidor público que tiene a su cargo la política social del gobierno del doctor Miguel Ángel Mancera Espinosa.