Al aumentar la violencia intrafamiliar, personas mayores, entre los más vulnerables

 

• Uno de los temas más dolorosos que la COVID-19 ha visibilizado, en la medida que la enfermedad del coronavirus crece, también lo hace la violencia en los hogares
• Debido a la crisis sanitaria la violencia intrafamiliar se visibiliza de manera más enfática y en algunos casos se potencia

 

Durante el curso del confinamiento por el COVID19, la antropóloga Florence Rosemberg, de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), advirtió que los grupos más vulnerables ante la violencia intrafamiliar personas mayores, los infantes, las mujeres, personas discapacitadas y la comunidad LGBT.

 

Esta experta destacó que en la violencia intrafamiliar se combinan el sexo-género, la edad y la condición sociocultural. “En el espacio doméstico se afecta más a los niños y a los adultos mayores, mientras que las violencias más graves son hacia grupos considerados socialmente invisibles, como los homosexuales, los discapacitados, los enfermos y los adictos”.

 

“Una complicación para estudiar a estos grupos se da porque en México la familia es un coto cerrado, donde los lazos afectivos permiten el abuso de un individuo sobre otro”, acusó Florence Rosemberg al participar en el ciclo de conferencias “Violencia intrafamiliar en el marco de COVID-19”.

 

Rosemberg señaló que el modelo de familia en México no es lineal ni mecánico, y está mediado por conflictos, enfermedades, circunstancias extrínsecas, o la combinación de algunas de ellas.

 

En este ciclo organizado por el Programa Universitario de Estudios de la Diversidad Cultural y la Interculturalidad (PUIC) de la UNAM, Guadalupe Valencia García, coordinadora de Humanidades, puso de manifiesto que uno de los temas más dolorosos que la COVID-19 ha visibilizado, en la medida que la enfermedad del coronavirus crece, también lo hace la violencia en los hogares.

 

No sólo se debe registrar este fenómeno, es necesario entenderlo y hacer justicia, apuntó esta experta universitaria al señalar que “no podremos atacarlo sólo por la vía legal, requiere de diversas vertientes pedagógicas”.

 

Al respecto, José del Val, titular del Programa Universitario de Estudios de la Diversidad Cultural y la Interculturalidad (PUIC), expuso que debido a la crisis sanitaria la violencia intrafamiliar se visibiliza de manera más enfática y en algunos casos se potencia.

 

Debe haber una ruptura con el patriarcalismo, una de las estructuras más dañinas y persistentes de la cultura occidental, acentuó el etnólogo.

 

Carolina Sánchez, secretaria académica del PUIC, informó que este ciclo inicia los espacios de reflexión y discusión sobre la violencia intrafamiliar, para contar con conocimientos útiles que aporten a la toma de decisiones frente a esta situación.

 

En su oportunidad, la jurista Rosa María Álvarez González, del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ), recordó que durante años la violencia intrafamiliar fue considerada por el Estado como un asunto privado.

 

Fue hasta julio de 1996, añadió, cuando se creó en México el primer antecedente legal para abordar este tema: la Ley de Asistencia y Prevención de la Violencia Familiar, puesta en marcha por el gobierno del entonces Distrito Federal.

 

“Esta Ley fue pionera en atender la violencia intrafamiliar, la cual siempre ha estado presente, incluso de manera normalizada”, recordó Álvarez González.

 

Por último, la jurista resaltó que con el confinamiento por la COVID-19 los viejos problemas se afianzan y las relaciones individuales se tensan. “Y el fracaso de la familia es el ámbito más propicio para gestar relaciones violentas en el futuro”, agregó.

 

La violencia intrafamiliar ha aumentado y se ha visibilizado durante el confinamiento, coincidieron estas personas expertas universitarias, reunidas de manera virtual en este ciclo organizado por el Programa Universitario de Estudios de la Diversidad Cultural y la Interculturalidad (PUIC).