Urgente necesidad de geriatras en Jalisco

• Preparar médicos de primer nivel en la atención de las Personas Adultas Mayores es la  opción  más inmediata
• Deberán orientar también  a las familias y  los cuidadores en temas básicos: manejo de la ansiedad y la depresión,  manejo de medicamentos y  habilitación de las habitaciones,  baños,  y los espacios que habitan
• Tampoco existen estancias de cuidados prolongados

En Jalisco se requieren por lo menos 400 médicos especialistas en personas de la tercera edad, pero solo existen 46 geriatras. De éstos, 36 recibieron su formación en el Hospital Civil, por lo cual es necesario preparar más médicos en temas básicos de atención al anciano, como el manejo de la ansiedad y la depresión, la educación a los familiares, el manejo de medicamentos, la habilitación de los baños, los cuartos y los espacios que habitan.

El servicio de geriatría del Antiguo Hospital Civil de Guadalajara hospitalizó a 700 adultos mayores el año pasado; hubo 774 pacientes que recibieron interconsulta; se dieron seis mil consultas externas, hubo dos mil 300 medidas preventivas y 380 atenciones médicas a distancia.

Además, en todo el hospital, se hospitalizó a 574 ancianos, hubo mil 474 pacientes y a consulta externa llegaron seis mil 70 personas. Esto suma un total de 7 mil 544 atenciones.

El doctor Benjamín Becerra Rodríguez, director del Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”, pregunta: “¿A qué nos lleva esto? La problemática en personas mayores de 60 años es cada vez más frecuente. Necesitamos entre 400 y 420, lo que nos hace ver que no estamos preparados para dar la atención requerida. Por ello surge la necesidad de seguir capacitando desde médicos generales, especialistas, en temas básicos”.

Uno de los doctores pioneros en esta especialidad es el doctor David Leal Mora, quien actualmente es jefe del Servicio de Geriatría del Hospital Civil “Fray Antonio Alcalde”. Desde su perspectiva, las necesidades del paciente geriátrico se han incrementado, especialmente porque “es el segmento de población que más rápido está creciendo.

Tenemos un retraso en recursos humanos, materiales, y no solo de los médicos sino de todos los profesionales de la salud que atienden ancianos. Esto ha ido cambiando, ya tenemos a diez residentes haciendo la especialidad a diferencia de hace 20 años que con mucha dificultad conseguimos una beca por parte de la Secretaría de Salud para que empezara la especialidad”.

Agrega que su enfoque no es solo en la atención del paciente, sino en la medicina basada en la persona, “ya estamos dejando el paradigma de la medicina basada en las enfermedades. Nos basamos en la necesidad de salud de cada persona y las enfermedades neurodegenerativas crean un conflicto porque causan problemas neurológicos, de inicio lento, progresivo, irreversible y que terminan con discapacidad completa.

Por eso tenemos que estar actualizados, con diagnósticos precoces y un manejo oportuno que trate de que el anciano permanezca funcional el mayor tiempo posible. Esto se facilita cuando el paciente tiene redes sociales, un cuidador que le asista”.

El otro problema es que no existen estancias de cuidados prolongados. Lo común es que a los ancianos les atienda un familiar, un extraño o, en muchos casos, ellos mismos.

“Pacientes con problemas de demencia o fractura de cadera no pueden valerse por sí mismos y requieren el apoyo de recintos adecuados para atender estas problemáticas”. En los asilos, por ejemplo, es común que no se atienda a pacientes que no se valen por sí mismos.

Leal Mora comenta que la primera causa de lesiones en los ancianos en casa son las caídas en los cuartos de baño, y fuera de casa es el transporte público.

“Quienes tienen más de dos caídas en un año, tienen más propensión a tener problemas severos por fractura de cadera, traumatismo craneoencefálico; no tenemos estadísticas, pero sí sabemos que el transporte público es la primera causa de muerte violenta de ancianos”.