El cuidado geriátrico privado potencia fuertes inversiones y alianzas comerciales en China

• En 2020, 243 millones de chinos tendrán 60 años o más
• El envejecimiento poblacional requerirá un gran volumen de servicios especializados que representan grandes oportunidades para proveedores internacionales  de salud, vivienda y servicios

China se enfrenta a un reto sin precedentes: para el 2020, 243 millones de personas en China tendrán 60 años o más. Este envejecimiento poblacional requerirá un gran volumen de servicios de salud especializados, informó desde Pekín la agencia Pueblo en Línea.

Para algunos esta realidad demográfica será un verdadero dolor de cabeza, mientras que para otros será una oportunidad, especialmente para los inversionistas extranjeros.

A finales de noviembre de este año, los representantes de 20 empresas de Reino Unido que trabajan en el sector de los servicios geriátricos participaron en Shanghai en un evento titulado “El cuidado de personas de la tercera edad”. El encuentro fue un primer paso para establecer alianzas comerciales con inversores chinos y gobiernos locales.

Una de las organizaciones que expuso sus servicios fue la empresa Annie Barr International (ABI), proveedor acreditado en el Reino Unido para ofrecer formación sanitaria de alta calidad y servicios. El próximo año, ABI abrirá su centro de entrenamiento en Shanghai donde preparará cuidadores, enfermeras, médicos y personal de apoyo para el mercado del cuidado de ancianos en China.

Annie Barr, fundadora y directora de ABI, afirmó que desde su primera visita en el 2014 percibió claras oportunidades en el sector de servicios de cuidado de los ancianos chinos.

“Está claro para mí que aunque los ancianos en las residencias parecían felices y bien atendidos, el medio ambiente, las normas y el nivel de atención no llegaban al ideal que estaban acostumbrados”, destacó Barr.

Seif Usher, director adjunto de la división Salud, Ciencias de la Vida y Asistencia Social para el este de China de UK Trade and Investment, señaló que además de los servicios de salud, también hay oportunidades de negocio en la planificación y la entrega de servicios de vida y cuidado de la jubilación.

Además de Reino Unido, empresas y organizaciones holandesas valoran oportunidades en China para importar sus servicios de salud destinados a la tercera edad.

A finales de octubre de este año, una delegación de 25 empresas holandesas encabezada por Martin Van Rijin, secretario de Estado para la salud, bienestar y deporte de los Países Bajos, firmó varios convenios de colaboración con empresas chinas durante un foro celebrado en Shanghai.

Los acuerdos cubren una amplia gama de áreas como equipamiento, gestión de procesos y cuidado de la salud; gracias a los acuerdos, una aplicación llamada RaIview, que puede evaluar la salud y el bienestar de un individuo, ha podido debutar en el mercado chino. RaIview fue desarrollada por el Instituto Holandés para la Salud y el Bienestar Humano. Cinco empresas chinas de propiedad estatal y promotores inmobiliarios ya han empezado a utilizar RaIview, cuyos clientes fundamentales son los jubilados adinerados.

En sintonía con las nuevas oportunidades, algunas empresas estatales convertirán parte de sus inmuebles en instituciones de cuidado de ancianos solventes. Del mismo modo, los desarrolladores de bienes raíces se replantearán algunos de sus proyectos de espacios urbanos para crear condominios dedicados al cuidado de ancianos y para albergar comunidades de la tercera edad.

“Se espera que más de mil organizaciones utilicen RaIview”, asegura Niu Min, gerente general de la empresa de cuidados de ancianos Lianzhong Investment Management Co, una de las dos empresas que distribuye oficialmente RaIview en China.

“El tamaño del mercado global de cuidado de ancianos en 1998 era de 200 millones de euros.Hoy llega a los 30 mil millones de euros”, estima Van Rijin, secretario de Estado para la salud, bienestar y deporte de los Países Bajos.

“Europa todavía se está recuperando de la recesión. El alto costo de la atención de personas mayores está ejerciendo una gran presión fiscal sobre los gobiernos. Tienen que implementar un sistema de servicios sostenibles, trabajando en estrecha colaboración con instituciones de investigación y empresas privadas.

En los Países Bajos, el gobierno ha tenido muy buenas experienciasen alianzas con empresas de propiedad privada, pues suelen aportar muchas ideas innovadoras”, enfatizó Van Rijin.

Yu Yue, una comerciante de 30 años que dirige su propio negocio de importación de alimentos en Shanghai, aprecia este tipo de ideas. Ella y sus padres ingresaron a su abuelo de 84 años de edad en un hogar de ancianos que administran expertos estadounidenses. Tomaron la decisión después que el anciano sufriera una fractura de cadera.

Muchos chinos como Yu se ven en apuros por falta de tiempo y de conocimiento profesional para cuidar a sus mayores. A menudo, recurren a proveedores de servicios especializados.

El número de familias que necesitarán de estos servicios, a medida que aumenta en 9,8 millones cada año la población de edad avanzada en China, se elevará. En el 2020, China será el hogar de 243 millones de ciudadanos con 60 años o más.

Según las Naciones Unidas, un país o región entra en una etapa de envejecimiento cuando el segmento poblacional mayor de 60 años representa el 10 por ciento de la población total.

Cuando una sociedad envejece a un ritmo rápido, la capacidad gubernamental para el cuidado de ancianos resulta insuficiente y se requiere abrir este servicio al sector privado.

El mercado para el cuidado de ancianos en China también se está expandiendo rápidamente. De alrededor de 4 mil millones de yuanes (617 mil millones de dólares) se estima que en el 2030crezca hasta los 13 mil millones de yuanes.

Según estimación de la Academia de Ciencias Sociales de China, para el 2050 el mercado de salud y cuidado de ancianos en China representará el 33 por ciento del PIB del país.